Personal ligado a las actividades pesquera y portuaria busca formar un Frente Veracruzano de apoyo a quienes perdieron su modus vivendi y hallar opciones productivas, informó Nicolás Rivera Domínguez, presidente de la Coalición de Pescadores, Marineros y Transportistas de Veracruz.
Dijo que en los últimos años esos sectores se han visto afectados por el progreso y modernización de la ciudad y aunque reconoció que era necesario e inevitable, lamentó que hiciera desaparecer oficios y actividades añejas en una ciudad con vocación marítima y portuaria.
“Estamos uniéndonos organizaciones en apoyo a los que estamos pasando la severa problemática que tenemos en el sector pesquero; y las otras agrupaciones como carretilleros, jornaleros, el desempleo que tienen por la ampliación del muelle, que han sido desplazados de sus trabajos.
“La gente necesita generar recursos para sus familias para cuando se abra la ampliación, pero tenemos la ampliación del viejo puerto, ahí todavía pueden solicitar trabajo para generar recursos para sus familias”, señaló Rivera Domínguez.
Estimó que hace 3 décadas en la vieja terminal marítima o viejo puerto de Veracruz se contaban por miles los trabajadores, y como resultado de la requisa del salinato aunada a la modernización portuaria ya queda casi nada.
“Desempleados están la mayoría de los viejos, que los viejos serán unos mil a mil 200 trabajadores. Pero llegó a haber hasta 5 mil a 7 mil trabajadores en el puerto. Empezó a decaer cuando se empezó a hacer la nueva estructura en 1992, con el presidente Carlos Salinas de Gortari.
“Tienen que abrir la cartilla para ellos; no porque sean carretilleros van a emplearlos como carretilleros, pueden generar otros empleos dentro de la ampliación; hay capacitación, hay montacarguistas, grueros, personas para oficinas, para diferentes tipos de empleos”, dijo el pescador.
Dijo que desafortunadamente varios líderes sindicales sólo ven su propio beneficios en vez de hacer una unificación y un frente o un bloque.
Destacó que quizá a los más de mil trabajadores que se quedaron sin empleo ya no les dan nada porque ya son ancianos, pero sí podrían contratar, por ejemplo, a los hijos de los antiguos carretilleros, que de hecho están preparándose para las nuevas tomas de trabajo.
Llamó a las empresas con presencia dentro de la nueva terminal marítima e incluso en la zona vieja a tomar en cuenta a toda esa mano de obra que es el sostén de sus familias, pues se dijo convencido de que con el crecimiento del nuevo puerto se requerirá mucha fuerza laboral.