La contingencia del coronavirus demanda la implementación de un esquema económico para reactivar a las empresas aunque momentáneamente se deje de lado esquemas macroeconómicos, señaló Pedro Fernández Martínez, vicepresidente nacional de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios.
“Los efectos colaterales no nos permite trabajar y necesitamos estímulos fiscales y que se revisen que nos apoyen con servicios como energía eléctrica. No nos sentimos satisfechos porque han dado prioridades a esquemas macroeconómicos cuando el recurso debe ser destinado a lo que se desencadena con el Covid-19”.
Admitió que la iniciativa privada se mantiene en incertidumbre ante la situación del Covid-19 pues se desconoce cuánto tiempo más podría prolongarse el paro laboral.
Por ello es indispensable que el gobierno además de reducir salarios, gastos, y reforzar las medidas de austeridad, otorgue incentivos fiscales al sector empresarial a fin de que puedan lograr una pronta recuperación.
“Esperábamos un plan de contingencia con estímulos fiscales y para la protección de la iniciativa privada. Son momentos difíciles y hay que tomar en cuenta que estamos entrando a la fase 3 de la pandemia y no hay certeza del apoyo del gobierno en este momento tan complicado”.
Recordó que los empresarios generan empleo y la situación adversa de materia económica podría agudizar ya que la productividad y el trabajo no puede desarrollarse al 100 por ciento ante las restricciones implementadas.
“Es difícil nadar contra corriente porque no podemos trabajar al cien por ciento. Esperamos apoyo porque no hay colores, todos somos uno y necesitamos estímulos para sacar adelante la economía del país”.