Los recursos que el Grupo Metropolitano del Agua cobra por concepto de servicios ambientales no se ejercen en el rescate del Pico de Orizaba, como se estableció en un inicio.
Ricardo Rodríguez Deméneghi, coordinador del proyecto Salvemos al Pico de Orizaba, dijo que los años pasan y no llega el dinero que se suponía eran para conservar la flora y fauna en el Pico de Orizaba y por consiguiente, la vida del glaciar que da origen al río Jamapa.
Al menos 2.5 millones de personas de la ciudad de Veracruz, Medellín y al rededores se abastecen del agua del afluente.
El Grupo MAS se comprometió, desde diciembre del 2010, a cobrar un porcentaje en el recibo por servicios ambientales para la conservación de la zona protegida.
Se desconoce que hacen con el recurso recaudado, que corresponde al uno por ciento del total del recibo del usuario.
De acuerdo con la respuesta dada en solicitudes realizadas a través de plataformas de transparencia, del año 2017 hasta febrero del 2021 recaudaron 19 millones 49 mil 413 pesos.
Son más de 217 mil usuarios, de los cuales 47 por ciento pagan el servicio de agua.
El director general del IMA, Francisco García, dijo en abril de 2021 que los recursos de servicios ambientales se invirtieron en estudios para el rescate, manejo y paisaje urbano de la laguna Olmeca y proyectos para las plantas de tratamiento los fraccionamientos Faro Laguna Olmeca y Palmas Coyol.
Cabe mencionar que el glaciar Jamapa es el último de los 14 que llegó a tener el Pico de Orizaba hasta 1940.
Desde 2009 se autorizó el cobro de 1 por ciento en el recibo emitido por lo que era el SAS (Servicio de Agua y Saneamiento Metropolitano) para la conservación de la Cuenca del Jamapa y Cotaxtla, como aportación “voluntaria” de los usuarios.
Rodríguez Deméneghi, dijo que en el 2010 se estimaba que el glaciar podría desaparecer entre 2035 y 2040. Ahora el límite es el año 2030.
Cuando el glaciar Jamapa deje de existir, no habrá más agua dulce que alimente la flora y la fauna de la región y no bastará el agua para ser explotada.
El glaciar Jamapa pertenece a la región hídrica 28.
De esta se desprende la cuenca Jamapa que le da vida a los acuíferos costera (3006) y Cotaxtla (3008).
El Grupo MAS extrae el agua de estos dos acuíferos y de acuerdo a la Comisión Nacional del Agua el costo por metro cúbico por litro de agua en la zona conurbada, dada la disponibilidad, escurrimiento y extracción es de 27 centavos, para uso doméstico y para uso agrícola no tiene costo.
Destacó que no existe una comisión reguladora, como ocurre con otros recursos, para establecer el precio.
En la Gaceta Oficial del Gobierno del Estado de Veracruz publicada el 21 de octubre de 2009, mediante el acuerdo 0268/2009 que se tomó en la sexagésima primera sesión ordinaria celebrada el 24 de septiembre de ese año, se menciona que los Ayuntamientos u organismos operadores municipales que presten el servicio de agua, drenaje y alcantarillado, realizarán acciones encaminadas a la generación de agua, a la declaratoria de zonas de conservación y promoverán el pago de los servicios ambientales.
El 19 de octubre del mismo año se concretó el convenio de colaboración con la asociación civil Fondo Ambiental Pico de Orizaba para la preservación de la flora, fauna silvestre, terrestre y acuática en los Parques Nacional De Orizaba.
En 2009 se aportó 279 mil 188 pesos a la FAPO y se usó en la creación de brechas apaga fuegos.
Desde entonces no se sabe que se hace con el recurso, pues no hubo ninguna otra aportación.
Con la llegada de Grupo MAS, se adjudicó también el compromiso del cobro por concepto de Servicios Ambientales como aportación voluntaria de los usuarios a quienes brindarían el servicio, pero tampoco se entrega ni transparenta el recurso.
Cabe destacar que la duración de la concesión es de 30 años, es decir, hasta 2046.
La Organización de las Naciones Unidas y la Organización de los Estados Americanos en 1998 afirmaron que habría que sembrar 20 millones de árboles por año durante dos décadas para proteger el ciclo del agua en el Pico.
Sin embargo, la tala indiscriminada realizada por los grupos humanos que viven cerca, ha mermado las actividades de reforestación que se han realizado con los pocos recursos que la organización ha recaudado a través de distintos medios.
Algunas de las actividades realizadas con los recursos destinados a la conservación del Pico de Orizaba, consistían en ofrecer empleos para el cuidado de la flora y la fauna en la zona, para la reforestación y vigilancia.
De esta manera se protegía la zona y las comunidades tenían una remuneración por ello.
El último glaciar de la montaña más alta de México está agonizando y aunque la sociedad civil está aportando su parte para la conservación de este recurso, se desconoce dónde está el dinero.