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Evasión en pago de derechos de autor, cercana a 80% en bares, hoteles y cafés

Evasión en pago de derechos de autor, cercana a 80% en bares, hoteles y cafés

La evasión en pago de derechos de autor es cercana a 80 por ciento en sitios que utilizan música en sus eventos, lamentó Jaime León Perea, secretario general del Sindicato de Músicos en el Estado de Veracruz afiliado a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC).

Aclaró que restaurantes, bares, hoteles, cafés, salones de fiestas y todo aquél con ingresos económicos que reproduce música y letras de canciones registradas con derecho de autor deben pagar regalías porque tienen un beneficio monetario, ya sean fijos o móviles.

Sin embargo y pese a que se les conmina a cumplir con ese deber legal, se abstienen de hacerlo y apenas una minoría realiza sus aportaciones conforme a la ley.

“Te puedo asegurar que la evasión es de 80 por ciento, tranquilamente, muy pocos cumplen. No hay que hacer otra cosa más que respetar las reglas: si vas a utilizar una canción hay que pasar el debido dinero de lo que se necesita para poder hacerlo efectivo.

“Aplica hasta con rockolas, cualquier lugar donde ponen música: hoteles, hasta elevadores que también utilizan esas cuestiones. Hay que estar dados de alta con Autores y Compositores, una cuota mensual y con eso tienes la libertad de reproducir todo lo que necesites, unos 2 mil pesos al mes para utilizar los derechos de autor”, explicó León Perea.

Recordó que tanto los autores de las letras como los de la música están protegidos legalmente por la Ley de Derechos de Autor, y cualquiera que en su negocio reproduzca las canciones porque obtiene in beneficio económico está obligado por ley a pagar por el uso de esas creaciones ajenas.

Como ejemplo mencionó que en un bar venden muchas cervezas y copas, lo que representa un ingreso para el propietario. Si ponen música, ya sea viva o grabada, deben pagar las regalías porque la usan para amenizar el negocio que les deja dividendos. No hacerlo es evadir la ley.

Lo mismo aplica para quienes amenizan un baile y llevan un grupo musical que interpreta piezas que no son de su autoría o quienes alquilan equipos de luz y sonido y reproducen discos o cualquier otro dispositivo.