Este sábado trascendió el hallazgo de una fosa clandestina en la localidad de Juan Díaz Covarrubias, municipio de Hueyapan de Ocampo, Veracruz. Los restos de ocho personas, siete hombres y una mujer, fueron encontrados desmembrados y parcialmente incinerados en el rancho "Aparicio", cercano a la carretera que conecta Casa Blanca con Alto Lucero.
El macabro descubrimiento fue realizado por agentes de la Policía Municipal, quienes alertaron a la Secretaría de Seguridad Pública y a la Fiscalía General del Estado (FGE) para dar inicio a las investigaciones.
Según los reportes iniciales, las víctimas habrían sido secuestradas en las localidades De Hueyapan y Catemaco, aunque no existían denuncias formales que acreditaran su desaparición.
Los cuerpos estaban ocultos en bolsas negras y parcialmente quemados.
En el lugar también se aseguraron dos vehículos, una camioneta y un automóvil blancos, aunque hasta el momento no se han reportado detenciones.
La fiscal general del estado, Verónica Hernández Giadans, no ha emitido declaraciones al respecto para confirmar o desmentir la información trascendida.
El contexto político añade presión al caso, ya que el hallazgo se produce en el último día de Cuitláhuac García como gobernador de Veracruz.
Hueyapan de Ocampo y sus alrededores no son ajenos a la violencia. La región, conocida por ser un corredor estratégico para actividades ilícitas, ha sido escenario de numerosos enfrentamientos y desapariciones en los últimos años.