Tres grupos del narco lavan ‘dinero sangriento’ en Veracruz
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Tres organizaciones del narco realizan operaciones de lavado de dinero en Veracruz, de acuerdo con informes de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Se trata de las organizaciones criminales de Los Zetas, Cártel del Golfo, y Jalisco Nueva Generación, cuya disputa por plazas en el territorio de Veracruz ha dejado una estela de violencia, asesinatos y desapariciones.
La UIF identificó 19 cárteles u organizaciones criminales en territorio nacional que realizan lavado de dinero. Tras irrumpir en Veracruz y Boca del Río con su grupo armado Los Matazetas, el Cártel Jalisco Nueva Generación desbancó al de Sinaloa y es actualmente la agrupación con mayor expansión en México. De tener presencia en cuatro entidades (2010), se expandió hasta dominar 27 estados.
Erick Valencia Salazar, apodado "El 85", fue el ex líder y fundador del grupo criminal Los Matazetas que operó en Veracruz y lideró con "El Mencho" el Cártel Jalisco Nueva Generación. A consideración de Valencia Salazar, fue su ex socio, "El Mencho", quien 'le puso el dedo', lo entregó a las autoridades federales para consolidar su poder.
El relevo del líder de Los Matazetas en la estructura criminal de Jalisco Nueva Generación pronto también alertó a los servicios de inteligencia estadounidenses. El Gobierno de Estados Unidos tiene en la mira al jefe máximo de Jalisco Nueva Generación en Veracruz, Puebla, Tabasco y Vallarta, Jalisco. La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro, junto con autoridades mexicanas, advirtió que Hugo Gonzalo Mendoza Gaytán, "El 90" o "el Sapo", mano derecha de Nemesio Oseguera en Veracruz tras traicionar al líder de Los Matazetas Erick Valencia Salazar, es responsable de asesinatos, numerosos secuestros y reclutamiento masivo a través de redes sociales supuestamente para que trabajaran como ‘guardias de seguridad’.
También fuentes de inteligencia de Estados Unidos relacionan a Liliana Rosas Camba, esposa del líder de Jalisco Nueva Generación en Veracruz, con lavado de dinero obtenido del narcotráfico.
Las indagatorias del Gobierno Federal, en colaboración con la DEA, para golpear a las finanzas del CJNG, alcanzaron a Veracruz y a personajes políticos como Tarek Abdala, ex tesorero de la secretaría de Finanzas de Veracruz y señalado como operador de un multimillonario desvío de dinero público en ese estado con Javier Duarte. El político incluso se presume tenía una estrecha relación con el ex jefe del CJNG Francisco Navarrete Serna, recientemente asesinado en Tierra Blanca.
Además, de acuerdo con informes del Gobierno de Estados Unidos y de Inteligencia Financiera, hay indicios de que de la mano de Jalisco Nueva Generación, la mafia china opera en Veracruz Puerto, Coatzacoalcos y Tuxpan. No hay, sin embargo, datos de operaciones de lavado de dinero en Veracruz por parte de los grupos criminales asiáticos.
El Cártel del Golfo tendría el dominio de operaciones de lavado de dinero y otras actividades criminales en el norte de Veracruz, aunque Los Zetas y, en mayor medida Jalisco Nueva Generación ya acechan sus feudos, de acuerdo con el mapa elaborado por Inteligencia Financiera.
Los Zetas tendrían el control en territorios del centro del estado de Veracruz. Zonas clave para ese grupo criminal aún estarían bajo el poder, desde la cárcel, de Mauricio Guízar Cárdenas, El Amarillo o Z 200, con Xalapa como feudo compartido con Jalisco Nueva Generación. Además, análisis de especialistas en seguridad y narcotráfico como los de Ricardo Ravelo han advertido la sangrienta disputa entre Jalisco Nueva Generación y Zetas Sangre Nueva en el corredor Orizaba-Córdoba-Puebla.
El Cártel Jalisco Nueva Generación tiene sus bastiones en el sur de Veracruz para operaciones de lavado de dinero y otras actividades criminales y estaría buscando acceso a Tamaulipas desde el norte de Veracruz, ya controlando ciudades como Poza Rica. Veracruz Puerto y Boca del Río seguirían siendo algunas de sus principales plazas en la entidad.
Aunque no figura en el mapa de UIF, el Cártel del Noreste de los hermanos Treviño Morales, de acuerdo con Ricardo Ravelo, se habría infiltrado con bajo perfil en Córdoba, la Cuenca, Coatzacoalcos, Minatitlán y otros municipios del sur de Veracruz.
Desde Tamaulipas, el Cártel del Noreste también buscaría infiltrarse a territorios en el norte de Veracruz, disputados para operaciones criminales por el Cártel del Golfo, Los Zetas y Jalisco Nueva Generación, sin que aparentemente hasta ahora lo haya conseguido.
El análisis de la UIF advierte que los flujos financieros ilícitos han aumentado considerablemente en los últimos años, y señala que México no cuenta con una metodología para medir con exactitud los recursos generados por los grupos del crimen organizado.
De los 19 grupos criminales con operaciones en el país, cuatro tienen presencia en más de 10 estados, siendo el Cártel Jalisco Nueva Generación el de mayor extensión, según la Evaluación Nacional de Riesgos de Lavado de Dinero y Financiamiento al Terrorismo (ENR) elaborada por la UIF.
La UIF detectó que el grupo criminal que lidera Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, tiene operaciones de lavado de dinero en 27 estados.
De acuerdo con el mapa, el cártel mueve dinero de sus negocios ilícitos en Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur y Colima.
También en Chihuahua, Ciudad de México, Coahuila, Chiapas, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca y Querétaro.
Asimismo en Quintana Roo, Puebla, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Zacatecas.
La segunda organización criminal con más operaciones financieras de lavado de dinero en el país es el Cártel del Pacífico (Sinaloa), con presencia en 21 estados.
Esa organización criminal, encabezada por Ismael El Mayo Zambada, blanquea dinero en Baja California, Baja California Sur, Sonora, Chihuahua, Sinaloa, Durango, Coahuila, Zacatecas y Jalisco.
También en Colima, Aguascalientes, Querétaro, Estado de México, Ciudad de México, Guerrero, Chiapas, Tabasco, Campeche, Oaxaca, Yucatán y Quintana Roo.
El Cártel del Golfo está presente en 14 estados: Aguascalientes, Coahuila, Chiapas, Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Nuevo León, Oaxaca, Quintana Roo, Tamaulipas, San Luis Potosí, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.
En el caso de Los Zetas, le fueron detectados movimientos de lavado de dinero en 13 entidades: Campeche, Hidalgo, Jalisco, Estado de México, Nuevo León, Oaxaca, Puebla y Querétaro.
También en Quintana Roo, San Luis Potosí, Tabasco, Veracruz y Yucatán.
El resto de los 15 grupos criminales citados en el informe registran actividades en cinco estados o menos.
El Cártel del Noreste tiene presencia en Coahuila, Nuevo León, San Luis Potosí, Tamaulipas y Zacatecas. Desde el norte de Veracruz, Jalisco Nueva Generación buscaría ingresar a sus plazas en Tamaulipas. Guerreros Unidos está en Guerrero, Estado de México, Morelos y Oaxaca.
A La Familia Michoacana se le ubicó en Guerrero, Estado de México y Michoacán.
El Cártel de los Beltrán Leyva tiene presencia financiera en Oaxaca, Sonora y Sinaloa; el Cártel de Santa Rosa de Lima, en Guanajuato y Querétaro; La Unión Tepito en la Ciudad de México y el Estado de México, al igual que su rival, la Fuerza Anti-Unión.
El Nuevo Cártel de Juárez fue ubicado en Chihuahua, al igual que La Línea; mientras que Los Viagras se limitan a Michoacán, y Los Colombianos, a Morelos.
El Cártel Independiente de Acapulco abarca Guerrero y Oaxaca; el Cártel de la Sierra está en Guerrero; La Nueva Familia Michoacana sólo en Michoacán, y el grupo Nueva Plaza opera en Colima y Jalisco.
