La celebración de una boda en plena calle, estuvo a punto de acabar en desgracia cuando un sujeto en probable estado de ebriedad perdió el control del auto que conducía, para llevarse todo a su paso.
Los hechos se dieron la noche del sábado, cuando el individuo guiaba un carro Nissan Tsuru color blanco, por lo que, al circular por calle Nacional no se percató del desarrollo del festejo.
De esa forma al continuar con su viaje, irrumpió de manera aparatosa la unión nupcial, quedando todo en los daños materiales y el susto para los invitados.
Al final, el probable culpable fue detenido en la misma escena, y posteriormente entregado a las autoridades con el fin de responder por lo sucedido.