La presencia de un supuesto cadáver maniatado y con huellas de tortura movilizó la madrugada del miércoles a elementos policíacos al camino Zaragoza-Coacotla que recibieron la llamada de auxilio.
Sin embargo, al llegar al sector, en un área despoblada, se encontraron con que el supuesto muerto era en realidad un individuo que en avanzado estado de ebriedad se quedó dormido en vía pública, logrando reaccionar minutos después para descartar alguna escena violenta.
Incluso, la falsa alarma hizo presumir a corporaciones que se trataba de alguna víctima de la delincuencia, escenario que quedó descartado después, para comprobarse que todo fue un malentendido.
Finalmente, el sujeto de identidad desconocida continuó su camino, concluyendo todo en la movilización por un hecho que en realidad nunca se dio como en un principio se dijo.