En pleno corazón de una de las zonas más transitadas por xalapeños y turistas, una obra abandonada en el Paseo de los Lagos ha generado una creciente preocupación entre vecinos y visitantes.
Este espacio, ubicado a un costado de uno de los lagos, se ha convertido en refugio de personas en situación de calle y presuntos delincuentes, quienes han sembrado el temor en la comunidad.
Vecinos y transeúntes han denunciado que el inmueble, compuesto por varios cuartos llenos de cartón y ropa acumulada, es utilizado como punto de reunión por individuos que alteran el orden público.
Según explicaciones extraoficiales, la falta de "señalamientos específicos" limita la capacidad de intervención de los uniformados, lo que deja en el limbo cualquier acción que pueda garantizar la seguridad de la comunidad.
Esta aparente inacción ha provocado indignación, ya que los ocupantes del lugar no solo representan un riesgo de asalto, sino que también afectan la tranquilidad de quienes buscan disfrutar de este tradicional espacio de recreo.
El Paseo de los Lagos, considerado un símbolo de Xalapa, muestra signos evidentes de abandono. Lozas levantadas, en su mayoría por raíces de árboles, y excremento humano a lo largo del corredor reflejan la falta de atención de las autoridades.
Recientemente, se colocó una cinta amarilla de advertencia alrededor del inmueble. Sin embargo, se desconoce si fue puesta por Protección Civil o alguna corporación policial, y su efecto ha sido nulo para desalentar la presencia de los ocupantes. Este acto simbólico, más que tranquilizar, parece ser una muestra del desinterés institucional hacia un problema creciente.