En el municipio de Uruapán, Michoacán, más de 400 tortillerías han cerrado sus puertas debido a amenazas del Cártel de Los Viagras. La Asociación de Industriales de la Masa y la Tortilla en Michoacán confirmó esta situación y expresó su preocupación por la falta de condiciones de seguridad en la zona.
Las fuerzas federales revelaron que esta medida del Cártel de Los Viagras tiene como objetivo justificar un operativo de la Policía Municipal y evitar el ingreso de sus rivales del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Los habitantes de Uruapán se mostraron sorprendidos y afectados por el cierre masivo de estas unidades de negocios en la localidad, ubicada a 110 kilómetros de la capital de Michoacán. Ante la situación de inseguridad, los pobladores abarrotaron tiendas y centros comerciales para adquirir tortillas de harina de marcas comerciales.
El problema no se limita solo a Uruapán, ya que la Asociación de Industriales de la Masa y la Tortilla advirtió que, debido a la inseguridad, están considerando cerrar establecimientos en otros 30 municipios.
Esta medida también es en apoyo a sus compañeros de Uruapán, y no descartan que en próximas horas o días, más de 3 mil tortillerías cierren en las principales ciudades del estado.
Además de las amenazas a las tortillerías, también se han reportado amenazas hacia industrias que comercializan otros productos de la canasta básica en la región.
La industria de la masa y la tortilla ha pedido a las fuerzas federales y fuerzas armadas que intervengan y pongan un alto a la escalada de violencia que los afecta.
La situación de inseguridad también ha afectado a otros sectores, como el transporte público, que ha sido blanco del crimen organizado en semanas pasadas.
Aunque no se reportaron personas heridas, se registraron cuantiosos daños materiales luego de que la delincuencia atacara e incendiara unidades de transporte.
Tanto la Guardia Civil como la Policía Municipal no han logrado frenar la operatividad y movilidad de las organizaciones criminales, lo que ha provocado un impacto negativo tanto en la población como en el sector económico de la región.