La tarde de este martes, en la colonia Felipe Carrillo Puerto, en Xalapa, un fuerte olor a putrefacción alertó a los vecinos de la calle Flores Magón, esquina con Venustiano Carranza.
Lo que en un principio fue una inquietud colectiva, pronto se transformó en una desgarradora confirmación: el fallecimiento de una mujer de 90 años, cuyo cuerpo fue encontrado en avanzado estado de descomposición dentro de su hogar.
El descubrimiento fue realizado por un sobrino de la fallecida, quien acudió al domicilio tras recibir múltiples alertas de los vecinos sobre el olor que emanaba de la vivienda.
Al ingresar, encontró el cuerpo de su tía, quien había estado viviendo sola y lidiando con problemas de salud. Según los primeros reportes, las autoridades municipales que arribaron al lugar presumen que la causa de muerte fue natural, dado su historial médico.
El caso ha generado preguntas entre los vecinos y familiares. La fallecida era conocida en el vecindario por su carácter reservado y su avanzada edad, lo que había hecho que muchos asumieran su vulnerabilidad.
Sin embargo, el tiempo que pasó hasta que alguien notó su ausencia pone en tela de juicio el tejido comunitario y la solidaridad entre vecinos.
El suceso también deja al descubierto la falta de seguimiento y atención a los adultos mayores que viven solos, una realidad común en muchas ciudades del país.
La muerte de la mujer no solo exhibió la vulnerabilidad de las personas de la tercera edad, sino también la necesidad de establecer redes de apoyo más efectivas para prevenir tragedias similares.
Tras el hallazgo, policías municipales aseguraron el lugar, mientras peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron las diligencias correspondientes.
Aunque no se descarta la hipótesis de que el fallecimiento sea patológico, se abrirá una investigación para esclarecer los hechos y descartar cualquier posibilidad de intervención externa.
El cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense para la autopsia de ley.