Veracruz llevó a cabo la mayor incineración de narcóticos en su historia, destruyendo un total de 6.94 toneladas de drogas. La mayor parte de los estupefacientes destruidos correspondía a marihuana, pero también se incluyeron otras sustancias como clorhidrato de metanfetamina, cocaína, clonazepam y clorhidrato de cocaína.
Este operativo tuvo lugar en la Base Aeronaval de Veracruz y contó con la participación de autoridades estatales y federales. Entre las instituciones involucradas destacaron la Fiscalía General de la República (FGR) y diversas fuerzas de seguridad.
La cooperación entre estos organismos permitió llevar a cabo una operación eficiente y segura, que no solo eliminó grandes cantidades de drogas, sino que también envió un mensaje firme contra el narcotráfico en la región.
Las autoridades estatales señalaron que la incineración de estos narcóticos es un paso importante dentro de una estrategia más amplia para combatir la criminalidad y reforzar la seguridad en el estado. Este esfuerzo busca impedir que las drogas lleguen a las calles y, especialmente, que afecten a la juventud en Veracruz.
La incineración de estas casi 7 toneladas de drogas representa un duro golpe a las redes delictivas que operan en la región. Las autoridades resaltaron que este decomiso no solo debilita a los grupos del crimen organizado, sino que también protege a las familias y comunidades al reducir la disponibilidad de estupefacientes.
Este operativo es parte de la estrategia impulsada por la Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz, la cual busca reducir los niveles de violencia y fortalecer la seguridad en todo el estado de Veracruz.
Las autoridades afirmaron que seguirán trabajando en colaboración con los organismos de justicia federal para mantener una lucha constante contra el narcotráfico.
Las autoridades aseguraron que este operativo no será el último y que seguirán implementando estrategias para erradicar el narcotráfico y asegurar un entorno más seguro para los veracruzanos.