Alpatláhuac, un tesoro escondido en las montañas de Veracruz

Alpatláhuac, es un municipio que combina naturaleza, cultura y gastronomía en Veracruz, se encuentra a tres horas del Puerto, en la Zona Centro de las Altas Montañas. Es un lugar de grandes atractivos turísticos totalmente naturales, donde se respira aire puro y se encuentra su guardián, el Pico de Orizaba, además de contar con su propia cascada.

Su nombre significa “donde se ensancha el agua” en náhuatl, y hace referencia a los arroyos que riegan su territorio provenientes del río Atoyac. Alpatláhuac es un pequeño pueblito que tiene una población de 9,691 habitantes y una superficie de 71.03 km², que se ha ido expandiendo con el tiempo. 

Es un destino ideal para los amantes de la naturaleza, ya que cuenta con una gran diversidad de ecosistemas, desde bosques de pino y encino hasta selvas húmedas. Entre sus atractivos naturales se encuentra la cascada de Cocalzingo, también conocida como la cascada de Alpatláhuac, que se puede observar desde las rocas entre el Cerro de los Gentiles, un espectáculo natural que te hará sentir pequeño en medio del inmenso paisaje.

¿Qué actividades hacer en Alpatláhuac? 

En esta zona se pueden practicar infinidad de deportes extremos, como el senderismo, ciclismo de montaña, rapel y la escalada, debido a sus cerros y cañones.

Alpatláhuac también es un lugar rico en cultura e historia, ya que fue habitado por los totonacas antes de la conquista española, y luego por los franciscanos que evangelizaron la región. Su cabecera municipal lleva el nombre de Santa María Magdalena de Alpatláhuac, y conserva una iglesia del siglo XVII que alberga una imagen de la santa patrona. Además, se pueden visitar las cinco congregaciones que forman parte del municipio: Xicola, Ayahualulco, Agua de Oro, Ixtaquilitla y Cocaltzingo, donde se puede apreciar la arquitectura, las costumbres y las fiestas tradicionales de sus habitantes.

Sobre su gastronomía

La gastronomía de Alpatlahuac es otro de sus atractivos  que encantan a los turistas ya que ofrece una variedad de platillos típicos de la región, como el mole de guajolote, pipián, chileatole, pan de elote, su típico tamal de frijol y atole de granillo. También se pueden disfrutar de los dulces de leche, las cocadas, las alegrías y los jamoncillos que se elaboran de forma artesanal, siendo populares de la zona montañosa.

Alpatláhuac es un gran destino natural, escondido en un rinconcito de Veracruz, que ofrece a sus visitantes, paisajes naturales, sabores únicos y tradiciones ancestrales. Así que si buscas una escapada alejada de la urbe y tranquila:

¡Alpatláhuac es una opción que no te puedes perder!