El fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, asistió este miércoles a una reunión de seguridad en Palacio Nacional, donde coincidió con la presidenta Claudia Sheinbaum.
La presencia de Gertz Manero no pasó desapercibida, pues se había informado previamente que no acudiría regularmente a las reuniones del gabinete de seguridad y que enviaría un representante en su lugar.
Sin embargo, su participación en esta sesión llamó la atención debido al contexto de violencia que atraviesa el país.
La reunión se celebró tras el reciente asesinato del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos.
Gertz Manero salió del Palacio sin dar declaraciones y con un atuendo discreto: una boina negra y un cubrebocas que cubría su rostro.
La reunión de seguridad incluyó a otros altos funcionarios del gobierno, como el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, y la consejera jurídica de la Presidencia, Ernestina Godoy.
No se dieron detalles específicos sobre lo tratado con el fiscal general.
Sin embargo, la asistencia de Gertz Manero podría estar vinculada con un esfuerzo coordinado para tomar medidas más estrictas en seguridad pública.
En septiembre, Claudia Sheinbaum confirmó que Gertz Manero continuará como fiscal general de la República durante su administración. La relación entre ambos parece sólida.