A través del Seguro de Salud para la Familia, personas que no cuentan con ese beneficio pueden incorporarse de manera voluntaria al IMSS para contar con el respaldo de un servicio médico en caso de enfermedad.
Érick Sánchez Lucho, titular de la jefatura de Servicio de Afiliación y Cobranza, explicó que esta incorporación es para cualquier persona y sus familiares o bien para mexicanos que se encuentren en el extranjero, siempre y cuando no tengan un esquema de seguridad social en otra institución y no padezcan enfermedades preexistentes.
"A través de este seguro se ampara a la persona asegurada y a su núcleo familiar, como cónyuge, concubina, hijos o hijas, padre y madre del solicitante, así como abuelos, nietos, hermanos primos, hijos de los hermanos y hermanos de los padres del sujeto de aseguramiento", mencionó.
Para acceder a este servicio, apuntó, se debe cubrir una cuota anual, la cual se da por cada miembro del núcleo que se incorpore y su cobertura se da el primer día del mes inmediato al siguiente de la contratación.
Agregó que en caso de que el asegurado quiera continuar con el seguro, deberá hacer su renovación dentro de los 30 días naturales anteriores al vencer el año calendario.
A través de ese seguro, detalló, las personas contarán con asistencia médica, quirúrgica, farmacéutica, hospitalaria y maternidad, en esta última tendrán que haber pasado los 10 meses desde el inicio de la contratación.
Agregó que hay enfermedades preexistentes que pueden impedir su incorporación o padecimientos con ciertos periodos de espera, así como algunas exclusiones, como son cirugía estética, lentes, aparatos auditivos, tratamiento de padecimientos crónicos que requieran control terapéutico permanente.
Cabe mencionar que el trámite también está disponible en el portal de Servicios Digitales, y para ello el interesado deberá tener a la mano CURP y NSS de cada integrante del grupo familiar, correo electrónico y datos para responder el cuestionario médico proporcionado por el IMSS.