Este 20 de octubre, sujetos armados asesinaron al sacerdote Marcelo Pérez Pérez, párroco del templo de Guadalupe en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas.
El cura, originario de San Andrés Larráinzar, fue agredido en el barrio de Cuxtitali al oriente de la ciudad cuando, según testigos, salía de oficiar una misa y recibió al menos ocho disparos antes de que sus agresores se dieran a la fuga.
Elementos policíacos acudieron al lugar luego del reporte de detonaciones de arma de fuego en las calles Las Peras esquina Flanz Bloom, donde encontraron una camioneta blanca Ford Titanium, dentro de la cual estaba el cuerpo del padre Marcelo Pérez.
El sacerdote era muy conocido por ser un activista y defensor de derechos humanos, además que era pieza clave en varias mesas de negociación donde se buscaba solucionar conflictos entre comunidades indígenas y algunos grupos criminales.
La presidenta Claudia Sheinbaum, de gira en Progreso, Yucatán, informó que ya se investiga el asesinato del sacerdote Marcel Pérez, además que la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, ya entró en contacto con autoridades de Chiapas.
Sin embargo, se limitó a adelantar que la información sobre los hechos se dará a conocer este lunes en su conferencia mañanera.
Diversos organismos han emitido pronunciamientos en torno al asesinato de Marcelo Pérez, entre ellos la oficina en México del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, condenando el hecho y exigiendo una investigación exhaustiva.
Por su parte, la Conferencia del Episcopado Mexicano se unió al reclamo de justicia, recordando el compromiso del padre Marcelo Pérez con los más necesitados.