El presidente Andrés Manuel López Obrador, de nueva cuenta exhibió a jueces.
Esta ocasión, pidió proyectar un caso en Puebla, donde las resoluciones de tres jueces habrían derivado en la liberación de dos presuntos secuestradores, y del ministro de culto Gerard Gómez, acusado de abusar sexualmente a una menor de edad.
El titular del Ejecutivo federal insistió en su reforma al Poder Judicial, para que la ciudadanía sea la encargada de escoger a las y los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
“Hay mucha corrupción en todo el Poder Judicial. Ahora están completamente descarados, bloqueando todas las iniciativas de cambio y apoyando a la delincuencia organizada y de cuello blanco. Se quitaron la máscara”.
El mandatario volvió a comprometerse a enviar la iniciativa antes de concluir su sexenio. Sin embargo, no descartó someter a la Fiscalía General de la República (FGR) a una eventual reforma, con el propósito de que su titular llegue por voto del pueblo.
“No lo descarto, porque incluso ya se llevó a cabo una época en la que se elegía al procurador y a los ministros”.