El general retirado, Rafael Hernández Nieto, detenido en julio por presuntamente estar relacionado con la desaparición de 43 normalistas en 2014, llevará su proceso en libertad.
Así lo determinó la Jueza Segunda de Distrito en Procesos Penales Federales, Raquel Ivette Duarte Cedillo, con sede en Almoloya, Estado de México, quien le cambió la medida cautelar que se le había impuesto.
El militar seguirá bajo proceso penal, pero con el beneficio de la prisión domiciliaria.
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— SPR Informa (@SPRInforma) August 23, 2023
Un juez cambio la medida cautelar del general en retiro Rafael Hernández Nieto, relacionado con el caso #Ayotzinapa, llevará su caso en libertad. pic.twitter.com/EuwJ0DKin3
De acuerdo con fuentes federales citadas por medios, el excomandante del 41 Batallón de Infantería de Iguala, Guerrero, abandonó la prisión del Campo Militar 1-A, en la Ciudad de México.
En julio pasado, el general retirado Rafael Hernández Nieto fue detenido en Puebla. Se trata del segundo militar de más alto rango aprehendido por presuntamente estar relacionado con la desaparición de 43 normalistas en 2014.
Al excomandante del 41 Batallón de Infantería en Iguala, Guerrero, lo capturaron en la colonia Villa Posadas de la ciudad de Puebla.
Esto luego de que en junio pasado se reactivaron las 17 órdenes de aprehensión que solicitó la Fiscalía General de la República (FGR) contra civiles y militares por los delitos de desaparición forzada de personas y delincuencia organizada.
Con él, ya suman nueve militares detenidos. Entre ellos José Rodríguez Pérez, comandante del 27 Batallón de Infantería; el capitán José Martínez Crespo y el sargento Eduardo Mota Esquivel.
En total, la FGR logró obtener 21 órdenes de captura: 16 de ellas contra militares. Sin embargo, en agosto de 2022, por aparentes conflictos entre el Fiscal General y la Unidad Especial que se encarga de investigar el caso Ayotzinapa, los mandamientos judiciales fueron cancelados.
Apenas el pasado 10 de junio, las órdenes volvieron a estar vigentes, pero no las 21, solo 17; una contra un civil.
El saldo de lo que ocurrió la noche de aquel 26 de septiembre de 2014, en Iguala, Guerrero fue de 43 estudiantes que siguen desaparecidos. Además de seis personas ejecutadas; entre ellas tres normalistas y más de 40 personas lesionadas.