Nueva Zelanda se mantiene en alerta máxima por un posible tsunami, todo por un terremoto de 7.3 que sacudió al país.
Las autoridades no han informado daños materiales o víctimas por este atroz fenómeno natural, que tomó por sorpresa a la nación de Oceanía.
El movimiento sísmico ocurrió a las 12:41 (hora local) y se localizó a 33 km de profundidad, informó el servicio geológico de Estados Unidos, donde se registra la todo tipo de movimiento telúrico en el mundo.
Con dicho terremoto, autoridades emitieron una alerta a Nueva Zelanda, señalando de un posible oleaje peligroso a 300 km del epicentro del terremoto.
Las islas de Kermadec se encuentran actualmente despobladas, a excepción del personal que se encuentra en una base en la Isla Raoul, donde cuentan son una estación meteorológica y de radio.
Hay que recordar que Nueva Zelanda se encuentra cerca de una falla entre las placas tectónicas del Pacífico y Oceánico se llega a registrar 14 mil terremotos al caño.