Varios comercios de Afganistán fueron cerrados por las fuerzas de seguridad de los talibanes, tras exhibir en sus aparadores artículos alusivos al Día de San Valentín.
De acuerdo con comerciantes, elementos del Ministerio de la Propagación de la Virtud y Prevención del Vicio llegaron y cerraron la puerta principal del mercado, para después ordenar a los locatarios suspender sus ventas y no celebrar San Valentín.
Para los talibanes, esta celebración está prohibida por el islam, ya que no forma parte de las tradiciones afganas, por lo que las patrullas antivicio irrumpieron en los comercios y destruyeron la decoración, impidiendo además que la gente comprara regalos.
Luego de esto, una delegación del Ministerio talibán colocó en un escaparate un cartel, en el que se ordena a la población en general no celebrar El Día de los Enamorados, el cual catalogó como una fiesta propiciada por los infieles.
"El Día de los Enamorados no es islámico y no forma parte de la cultura afgana, sino que es un eslogan publicitario de los infieles. Celebrarlo es mostrar simpatía hacia el papa cristiano", se lee en la hoja.
Según lo constatado por medios locales e internacionales, tras la prohibición, agentes del ministerio acompañados por guardias armados realizaron patrullajes por la calle de Kabul –una donde se aglomeran más vendedores–, para constatar que dicha orden será respetada.