¿Por qué EU no clasifica a fentanilo como arma de destrucción masiva?

En un movimiento controvertido, el gobierno de Estados Unidos ha descartado catalogar el fentanilo como un arma de destrucción masiva, desencadenando un debate acalorado.

Aunque algunos republicanos han instado a esta clasificación para destinar más recursos y coordinación en la lucha contra este opioide sintético, el gobierno aseguró que ya cuenta con las "herramientas necesarias" para combatirlo.

En una llamada con periodistas, Todd Robinson, encargado de la oficina antinarcóticos del Departamento de Estado, declaró: "Por ahora, no vemos que catalogar el fentanilo como arma de destrucción masiva nos brinde una ventaja adicional en nuestra lucha contra esta droga letal".

Según Robinson, los Departamentos de Estado y de Justicia, junto con la DEA (Agencia Antidrogas de Estados Unidos), poseen los recursos necesarios para perseguir y desmantelar las redes de tráfico de fentanilo.

Sin embargo, en estados gobernados por republicanos, como Florida, fiscales han instado al presidente Joe Biden a reconsiderar esta decisión y clasificar el fentanilo como un arma de destrucción masiva.

Argumentan que esto permitiría una mayor cooperación y asignación de recursos para combatir esta crisis que ha cobrado la vida de más de 70,000 personas el año pasado en Estados Unidos.

El fentanilo, un potente opioide sintético fabricado por cárteles mexicanos a partir de precursores químicos de origen chino, ha inundado las calles estadounidenses con su peligroso poder adictivo.

En un esfuerzo por abordar esta crisis global, Estados Unidos ha lanzado recientemente una coalición con más de 80 países, incluido México, para combatir el tráfico de fentanilo y otras drogas sintéticas.

A pesar de las tensiones, Robinson elogió la cooperación entre Estados Unidos y el Gobierno mexicano en la lucha contra el fentanilo.

Destacó la "relación excelente" entre ambos países y su compromiso de fortalecer la cooperación en la frontera común.

Sin embargo, señaló a China como un actor clave en esta crisis, instándolos a hacer más en términos de monitoreo y compartición de información sobre los precursores químicos utilizados en la fabricación del fentanilo.

Todos somos conscientes del papel fundamental que desempeñan las empresas chinas en la distribución de los químicos necesarios para fabricar estas drogas, afirmó Robinson, enfatizando la necesidad de una mayor colaboración internacional en la lucha contra esta amenaza global.