Según el prestigioso ranking de TasteAtlas, nuestra gastronomía se ubica en el tercer lugar global, solo detrás de las cocinas griega e italiana, que obtuvieron el primer y segundo puesto respectivamente.
Este reconocimiento reafirma la riqueza cultural, histórica y de sabores que caracteriza a México.
En 2010, la Unesco declaró la gastronomía mexicana como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, resaltando su trascendencia como tradición viva. Desde las milenarias prácticas agrícolas hasta las recetas que fusionan influencias prehispánicas y coloniales, nuestra cocina cuenta una historia de siglos.
Celebraciones como el Día de Muertos son una muestra de cómo la comida va más allá del sustento: en México, hasta los muertos regresan por un buen plato de mole o tamales.
En el ranking de TasteAtlas, que evalúa más de 10,000 platillos, tres joyas mexicanas destacan:
Cochinita pibil: Ocupa el lugar 12 con una calificación de 4.52/5. Restaurantes como Los Tres Gallos (Cabo San Lucas) y La Chaya Maya (Mérida) la ofrecen en su máximo esplendor.
Sopa de lima: En el puesto 53 con 4.5/5, es un imperdible en Restaurante Los Almendros y El Pórtico del Peregrino (Mérida).
Pozole: Con 4.46/5, ocupa el lugar 75. Disfrútalo en La Casa de Toño (CDMX) o Pozolería Tía Calla (Taxco).
La gastronomía mexicana no solo alimenta, también une comunidades y refleja nuestra identidad. Este tercer lugar global no solo es un reconocimiento al sabor, sino al alma de México: una mezcla perfecta de historia, innovación y tradición.