La Comisión Nacional Sanitaria de China informó este sábado 14 de enero un total de 59.938 muertes relacionadas con el COVID-19, cuando las autoridades empezaron a relajar las restricciones que mantenían contra la pandemia. Se trata de las primeras cifras importantes sobre el actual brote que entrega Pekín.
La edad media de los fallecidos registrados en centros médicos fue de 80 años de edad. El 90.1% de los fallecidos tenían más de 65 años, y más del 90% sufrían enfermedades subyacentes, según la Comisión.
El organismo aclaró que realiza pruebas PCR para clasificar las muertes de los pacientes como relacionadas con elCOVID-19, y que las causas de los fallecimientos por el virus fueron fallos respiratorios o enfermedades subyacentes que empeoran tras desarrollar COVID-19.
El organismo también aseguró que los casos graves de COVID-19 en el actual brote propagado por el país alcanzaron su pico el pasado 5 de enero, unas semanas después de que las autoridades relajaran la política de 'cero covid' que mantenían hasta entonces.
La rápida propagación del virus en China en las últimas semanas ha sembrado dudas sobre la fiabilidad de las cifras oficiales.
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, aseguró la semana pasada que China no está dando cifras completas de fallecidos por COVID-19en el actual brote, lo que impide saber el verdadero alcance de la enfermedad incluso a nivel global.
Según un estudio de la Universidad de Pekín, alrededor de 900 millones de personas se han contagiado de COVID-19 en China después de que el país desmantelara la política de ‘cero covid’ y apostara por un control más laxo de la pandemia.