Ataques del 11-S impactaron en Derechos Humanos y seguridad global

A 22 años de los ataques terroristas del 11-S que conmovieron a Estados Unidos, marcando el colapso de las Torres Gemelas de Nueva York, se desencadenaron consecuencias significativas en materia de derechos humanos y libertades. 

Expertos en México advirtieron que, en nombre de la seguridad internacional y la militarización global, se han restringido estas libertades.

Durante la mesa de análisis titulada "Resonancias del 11-S en las Relaciones Internacionales", el profesor Cesari Irwing Rico Becerra subrayó que, en la actualidad, las personas están dispuestas a sacrificar ciertos aspectos de su libertad debido a la amenaza constante del terrorismo y al uso político del miedo, que se convierte en una herramienta de control y disciplina social.

Becerra enfatizó que estas narrativas hegemónicas, relacionadas con el miedo y la seguridad internacional, se pueden observar en diversos ámbitos, como legislaciones, controles en aeropuertos, pasos fronterizos y la vigilancia en espacios públicos en todo el mundo.

El especialista en geopolítica crítica y militarización destacó que, si bien el 11 de septiembre fue un evento simbólico de gran magnitud, sus consecuencias tangibles profundizaron las violencias en diferentes sociedades a nivel global. 

Esto marcó el inicio de un régimen geopolítico que afecta la vida cotidiana de las personas en todas las escalas.

Irwing Rico señaló que la militarización de la seguridad internacional, conocida como "seguritización planetaria", no es un fenómeno que surgió exclusivamente después del 11 de septiembre de 2001, sino que se ha gestado históricamente como parte de proyectos de continuidad desde las últimas décadas del siglo XX.

LIBERTAD INDIVIDUAL, SACRIFICADA EN ARAS DE LA SEGURIDAD

Sandra Kanety Zavaleta Hernández, al intervenir en la discusión, destacó que los eventos del 11 de septiembre introdujeron en las sociedades, incluso en aquellas ajenas al terrorismo, una lógica occidental de seguridad tradicional, donde la libertad se sacrifica en nombre de la seguridad, lo que lleva a la violación de libertades y derechos fundamentales.

Para Zavaleta Hernández, las políticas y estrategias de seguridad basadas en enfoques tradicionales militares y policiales no siempre han garantizado la seguridad de las poblaciones. Más bien, la seguridad ha servido como un instrumento de poder y control para mantener el orden global y el sistema capitalista de producción.

Destacó que el 11 de septiembre volvió a situar en el centro del debate la seguridad y la construcción de amenazas en la búsqueda de la hegemonía, donde se señalan otros enemigos como el comunismo o el narcotráfico.

Agregó que la militarización ha sido un pilar central de la perspectiva de seguridad tradicional y de las relaciones de poder en el ámbito global. 

A partir de 2001, con la "guerra contra el terrorismo", Estados Unidos lidera el presupuesto militar mundial, seguido de cerca por Rusia, Francia, el Reino Unido, China e India, los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.