Se elevan a 73 los muertos hallados en fosas comunes de un bosque de Kenia

Recuperan autoridades kenianas 73 cadáveres procedentes de fosas clandestinas en un bosque de Kenia, la policía cree que eran pertenecientes de un grupo cristiano donde afirmaban que “irían al cielo si morían de hambre”.

La cruz roja keniana ha informado que han sido reportadas como desaparecidas 112 personas, por lo que las autoridades no descartan encontrar más cuerpos en las siguientes exhumaciones.

El pasado 14 de abril, fue detenido el líder de una secta, Paul Mackenzie por informar sobre la existencia de fosas pocas profundas con cadáveres de al menos 31 de sus seguidores.

“El número de muertos asciende ya a 73 personas”, declaró a Reuters por teléfono Charles Kamau, detective jefe de Malindi, en el condado de Kilifi.

Hay que puntualizar que los seguidores de la Iglesia Internacional de la Buena Nueva estaban viviendo aislados de la zona urbana, a unas 324 hectáreas dentro del bosque Shakahola.

Por su parte, por medio de las redes sociales, La Dirección de Investigaciones Criminales declaro que hasta el momento habían rescatado 33 personas.

Rescate de ocho personas

El jefe de la policía de Kenia, Japhet Koone, mencionó que fueron halladas ocho personas vivas y demacradas, pero murieron a las horas del rescate.

Hasta el momento, se ha informado que al menos 14 personas de la secta se encuentran bajo custodia, por su parte, Mckenzie, tras su arresto el pasado 14 de abril, fue procesado, un juez señalo que tenían 14 días para llevar investigaciones mientras que el líder de la secta se mantenían detenido.

Medios kenianos informan que Mckenzie  se ha negado a recibir alimentos y a tomar agua.