Las redes sociales se han convertido en la principal herramienta para los tratantes de personas en Veracruz. La entidad ocupa actualmente el cuarto lugar a nivel nacional en incidencia de este delito.
A través de perfiles falsos, los delincuentes ofrecen empleos con salarios atractivos y horarios flexibles, engañando a sus víctimas para asistir a entrevistas en lugares como estacionamientos, restaurantes o domicilios privados.
Una vez allí, las personas son privadas de su libertad y trasladadas a otros lugares.
Entre enero de 2023 y junio de 2024, se registraron 130 casos de trata de personas en Veracruz, según el Cuarto Reporte Anual del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México.
Esta cifra coloca al estado después de Ciudad de México, Estado de México y Jalisco en términos de número de casos reportados. A nivel nacional, los reportes también se concentran en Puebla, mientras que Durango, Zacatecas y Aguascalientes presentan las cifras más bajas.
El informe destaca que la modalidad más común de trata en México es la prostitución ajena, seguida de otras formas de explotación sexual. Además, se identificaron tres zonas con alta concentración de reportes relacionados con la migración, entre las que se incluye Veracruz.
Estas áreas, junto con otras como Chiapas, Oaxaca, Michoacán, Guerrero y Jalisco, se han convertido en puntos críticos para la trata de personas.
Los tratantes utilizan redes sociales para contactar a sus víctimas, prometiendo oportunidades laborales engañosas.
"El ofrecimiento de falsos empleos es la principal forma en la que tratantes de personas atraen a sus víctimas", explica Salvador Guerrero, presidente del Consejo Ciudadano.
Este método representa el 30.6 por ciento de las formas de captación, seguido por casos no especificados (22.3 por ciento) y la participación de familiares (21.1 por ciento).
Otros métodos incluyen promesas de ayuda (10.7 por ciento), enamoramiento (8.3 por ciento), organizaciones criminales (5.8 por ciento) y ofertas de estudios o uso de sustancias (0.6 por ciento).
Las mujeres y los menores de edad son los grupos más vulnerables, representando el 65 por ciento y el 48.8 por ciento de las víctimas, respectivamente. En muchos casos, las víctimas son explotadas sexualmente o forzadas a prostituirse, mientras que una parte significativa también sufre trabajo o servicio forzado.
En el 41.3 por ciento de los casos, no existía una relación previa entre el tratante y la víctima; sin embargo, en el 21 por ciento de los casos, había algún vínculo familiar, con padres, padrastros, parejas sentimentales o tíos involucrados.
Desde 2019, la Línea y Chat Nacional Contra la Trata de Personas (LNCTP) ha recibido más de 12 mil 593 reportes de trata, con un incremento en el primer semestre de 2024 llegando a casi 300 reportes.