Producirán 2 mil jícaras para nueva película de La Malinche
La jícara, un articulo artesanal de madera, obtenido del fruto de un árbol que lleva el mismo nombre y que mediante un procedimiento ancestral, se ha ocupado como vasija; sobrevive gracias a su gran utilidad principalmente entre las comunidades indígenas como Oluta, comenta Miguel Jara Román,
Se trabaja en su rescate mediante un taller que ofrece en esta Villa para el público en general y también como parte de un proyecto en el que El participará para la creación del escenario y ambientación de una película sobre la Malinche.
Imagen del golfo visitó para conocer detalles de su taller, a Miguel Jara, mejor conocido como El Guero Jara, que ha sido reconocido por el gobierno estatal y federal por su trabajo en el rescate de tradiciones, artesanías y artefactos prehispánicos que ha expuesto en diversos eventos del Estado
Pero además por ser un exitoso diseñador de trajes típicos que ha ganado varios concursos de belleza en la entidad.
La jícara es un árbol que no ha dejado de existir aun cuando solo se aprovecha en este caso, su fruto para hacer vasijas que luego son ocupados para servir agua y café, el popo y alimentos en algunos eventos culturales y artísticos y en hogares de familias indigenas.
Para convertirlos en vasijas, la jícara luego de ser cortado del árbol, le es extraída la pulpa y las semillas, posteriormente es sometido a una prueba de agua caliente y más tarde, tallado hasta obtener un bonito pocillo que puede ser tallado y pintado, alcanzando así un valor extraordinario cultural y económicamente.
Y es que actualmente un objeto de ese tipo, llega alcanzar los 3500 pesos en algunas tiendas que ofrecen artículos prehispánicos originales. Localmente, afirma Miguel Jara, cuesta desde 40 pesos uno de ellos, pero su precio se puede elevar cuando se le genera un valor agregado como puede ser una pintura o un tallado especial.
La jícara es el fruto de un árbol del mismo nombre, que poco a poco ha ido desapareciendo aunque en Oluta existen en prometio 40 de ellos que aun ofrecen su fruto y que son cortados “en una luna especial” para ser convertidos en vasijas en el que podrá comerse cualquier alimento caliente o tomarse alguna bebida fría como el popo y agua de sabor, pues no absorbe olores ni sabores.
En esta villa es tradicional ocuparlo para el consumo del popo en los establecimientos que aun existen en este lugar, comentó el entrevistado.
Actualmente en el taller se busca la creación de 2 mil vasijas para ser ocupados en la ambientación de una película que se filmará en escenarios de Catemaco, sobre la vida de la Malinche.
Miguel Jara será parte del equipo que se encargará de crear el ambiente prehispánico y de invasión de los españoles. La película será filmada a finales de este año en el predio La Hermita, municipio de Catemaco, por la empresa internacional Paramount Global, informó el Guero Jara.
“Bernal Diaz del Castillo, escribió a España, que los indígenas comían en citáculos de madera pero que no es madera pero que emerge de ella misma, del cual hacen un corte zagas que nosotros llamamos cucharas y ellos llaman jomate” dice Miguel Jara Román, para describir que la jícara era ocupado desde el periodo de los aztecas y quizás más antes.
La pulpa de la jícara también es aprovechado por mujeres olutecas para obtener un jarabe para la tos y el asma, afirma.
PARA QUÉ SIRVE
Datos biográficos afirman que tradicionalmente la fruta en decocción se toma por vía oral para tratar:
La medicina tradicional le atribuye a las hojas propiedades para tratar la hipertensión. La pulpa del fruto es apreciada para uso medicinal. Algunas investigaciones han mostrado que tiene propiedades anti-hemorrágicas. Así mismo tiene compuestos que ayudan en la curación de enfermedades respiratorias leves.