El diputado federal Gerardo Fernández Noroña destacó que en el mes de marzo del 2022 se tendrá que tomar una decisión importante sobre la revocación de mandato en el caso del Presidente de la República, y sería bueno que gobernantes de todos los niveles se sometieran a la misma posibilidad.
“Ya el Senado aprobó la ley. A mí me parece bien cómo quedaron las preguntas, porque son dos preguntas que puedes contestar sí a cualquiera de las dos: sí, quiero que se vaya el Presidente, le perdí la confianza, o sí, quiero que termine su mandato”, apuntó.
Entrevistado a su llegada a una de las naves de la ex fábrica textil de Río Blanco para encabezar una plática con militantes y simpatizantes, consideró que la Cámara de Diputados no tendrá inconveniente en aprobar la ley como quedó.
Recordó que ese mismo año hay algunas gubernaturas en juego, “cinco o seis”, de las cuales espera que se gane la mayoría como en este año, en que se ganaron 13 de 15.
Consideró que el momento difícil va a ser el 2023 cuando se decida el relevo del Presidente, pero sin duda “se resolverá bien y en unidad”.
Sobre la importancia de que otras autoridades se sometieran también a la revocación de mandato, opinó que todas lo deberían hacer y así la gente pondría pero también quitaría a quien no dio los resultados deseados.
En el caso de Veracruz, Fernández Noroña señaló que Cuitláhuac García debería hacer una evaluación de lo que ha sido su trabajo hasta ahora para mejorarlo y profundizar la revolución sin violencia.
Mencionó que el poder “es muy cabrón y todo mundo en tu entorno lo que quieres oír”, por lo que es bueno escuchar voces críticas para mejorar.
Puntualizó que su comentario no era ninguna crítica, simplemente que al ir el gobernador de Veracruz a la mitad de su mandato es buen tiempo para revisar lo que está bien y corregir lo que no ha dado resultado.