A diferencia de otros años, en este la temporada de Todos Santos no genera expectativas entre los industriales de la panadería.
Y es que la situación crítica en materia económica está generando la suspensión de actividades en las escuelas, aunado a las temperaturas altas que siguen prevaleciendo en la zona, obligarán al sector a producir menos pan del que normalmente producen en estas fechas.
Así lo reconoció Alfieri Belli, panadero de la localidad de Santa Clara del municipio de Misantla.
"Las escuelas nos ayudaban mucho a promover esta tradición, hacían sus altares, hacían sus festejos y los jóvenes venían a traer su pan para convivir dentro de las aulas o en los centros de trabajo, pero eso desgraciadamente, eso no lo vamos a tener este año", lamentó.
Dijo que de plano el sector no prevé ningún aumento ni aunque sea mínimo en la demanda del producto, por lo que reiteró que incluso van a disminuir la producción de pan de muerto.
"Yo creo que tendremos que quedarnos debajo de lo que se produjo el año anterior, porque al no tener alternativas corremos el riesgo de que el producto se nos quede", apuntó.
Estableció que en los precios del pan no contempla ningún aumento, pues de por sí sus ventas son bajas y si lo encarecen la demanda sería aún menor.
Pese a todo, el industrial dijo esperar a que el cierre de año sea mejor que esta temporada que hasta el año pasado fue una de las mejores para ellos, y basó su dicho en que cuando hace frío la gente suele comer más pan.