Pese a la inconformidad de la población, en Orizaba se instalaron antenas de telefonía, lo que para los ciudadanos representa que es una ciudad en donde los gobernantes no hacen caso de lo que quiere la gente.
“Este fin de semana pusieron la antena en la colonia El Espinal, cuando el alcalde se ufana de que escucha y atiende a los ciudadanos y que en el momento en que van y hacen las peticiones inmediatamente les resuelve”, expresaron habitantes de la calle Azucenas.
Los inconformes indicaron que esas fueron las palabras del edil cuando recibió el premio al mejor alcalde, el cual no se merece.
Destacaron que hoy los habitantes de ese lugar tienen una preocupación mayor que la de la pandemia, pues en su calle y su colonia hay una antena de telefonía celular a cuya instalación se opusieron sin que las autoridades les hicieran caso.
Lamentaron que el alcalde no escuche a su pueblo, cuando se le pidió el apoyo para que cambiaran de lugar esa enorme construcción que está entre sus casas, cuando se supone que tendría que estar a más de 500 metros de las casas-habitación.
“No nos escuchó. Aceptó la multa de la empresa y dio luz verde autorizando la instalación sin importarle nuestra salud”, manifestaron.
Los pobladores indicaron que la antena está instalada entras las casas que habitan familias completas, con niños, personas de avanzada edad, mujeres embarazadas y otras con capacidades diferentes y con enfermedades crónicas.
Mencionaron que la ubicación de ese aparato sólo será un detonante de problemas de salud para quienes ahí viven.