La Diócesis de Orizaba se solidariza con las familias ante la incontrolable desaparición de personas que lamentablemente se ha incrementado en las últimas fechas; por ello, es necesario seguir trabajando en la prevención del delito para frenar este mal que azota a la región.
"En primer lugar una solidaridad para los familiares y amigos que buscan afanosamente a estos jóvenes; por otro lado, sabemos que hay mucho qué hacer en la prevención del delito del secuestro, de la desaparición forzada", expresó el vocero diocesano, Helkyn Enríquez Báez.
Subrayó que estos hechos preocupan a las comunidades, que saben que se arriesga la integridad de los jóvenes que no pueden desarrollar libremente sus actividades como cualquier persona, como en otras generaciones y tiempo se ha hecho.
Enríquez Báez destacó que se está a la espera de que realmente las reformas que se están impulsando, especialmente en las fuerzas de seguridad ayuden a prevenir y combatir todo aquello que atenta contra la integridad de los ciudadanos.
Cabe mencionar que la Comisión Estatal de Búsqueda de Veracruz, del lunes primero de julio a la fecha ha reportado al menos a cinco personas como desaparecidas, y de 14 días hasta hoy más de 10 como no localizadas, originarias de municipios de la región centro.
Entre ellas se encuentra Inés Guadalupe Guzmán Luna, originaria de Orizaba, de 25 años de edad y cuyos familiares realizaron una marcha por las principales calles de la ciudad para exigir su aparición.