Misa en Misantla honra a los fieles difuntos en el Día de los Muertos

En una emotiva celebración en el marco del Día de los Fieles Difuntos, el vicario Edel Rodríguez Arcos, encargado de la pastoral vocacional de la Diócesis de Misantla, ofició una misa en la que invitó a los asistentes a elevar oraciones por aquellos que han partido y esperan la gracia de Dios, la ceremonia reunió a numerosos fieles en un acto de comunión y esperanza, en el que se recordó que la muerte no es un final, sino un tránsito hacia la vida eterna.

Durante la homilía, el padre Rodríguez Arcos alentó a la comunidad a reflexionar sobre la muerte como un paso inevitable y lleno de sentido dentro del camino espiritual,

"reflexionemos que la muerte es solo el paso hacia la vida eterna y confiemos en la misericordia de Dios para llegar a su contemplación divina"

Exhortó a la congregación, quien escuchaba en silencio, embargada por el sentimiento de solemnidad.

A lo largo de la misa, se elevaron plegarias por las almas de familiares y amigos, así como por las de los niños, las personas que fallecieron en circunstancias trágicas y aquellas que, según la fe católica, permanecen en el purgatorio esperando la redención, al concluir la eucaristía, el vicario realizó la bendición de las cruces y coronas que varios feligreses habían llevado consigo, las cuales depositarían en los mausoleos de sus seres queridos en el Cementerio Sagrado Corazón de Jesús.

Este acto de fe y respeto, además de honrar a quienes ya no están, refuerza el sentido de unidad en la comunidad, la ceremonia fue una oportunidad para recordar que, aunque la pérdida pueda ser dolorosa, la esperanza de una vida después de la muerte brinda consuelo, la ceremonia concluyó con una invitación a confiar en la misericordia divina, permitiendo que la memoria de los fieles difuntos permanezca viva en el corazón de sus seres queridos.