Personal de la Jurisdicción Sanitaria número 7 que ha incurrido en malas conductas es protegido por ser cercanos a los directivos de la dependencia, aseguraron trabajadores, quienes llamaron a la Secretaría de Salud a que se investiguen los casos y se sancione a esas personas.
Indicaron que lamentablemente ha habido casos que afectan a ciudadanos e incluso al mismo personal, sin que quienes incurren en esas conductas reciban un correctivo.
Señalaron que el caso más reciente es el del hermano de la subjefa de la Jurisdicción, Francisco Romero Trejo, quien laboraba en el Centro de Salud de Contla, en el municipio de Atzacan.
De este se recibieron quejas debido a que constantemente acudía a laborar alcoholizado, por lo que incluso intentó agredir físicamente a una doctora a su cargo.
"Sin embargo, lejos de investigar el caso, lo que hicieron fue premiarlo, pues lo trasladaron a la Jurisdicción y ahora labora aquí", expusieron.
Sin embargo, comentaron, no ha sido el único caso, ya que anteriormente el médico Víctor Flores laboraba en el municipio de Astacinga, pero al parecer estuvo acosando a algunas pacientes, por lo que un marido lo amenazó, ante lo cual también fue traído a Orizaba.
Indicaron que cuando se tiene un problema, se debe poner bajo investigación y entre tanto al trabajador se le envía a otro centro de salud que esté a la misma distancia de donde se encontraba.
Agregaron que la encargada de los pasantes también fue acusada en el 2019 de acoso laboral, sexual y abuso de autoridad, eso cuando trabajaba en la Jurisdicción Sanitaria número 1 de Pánuco, pero lo único que pasó fue que la trajeron a esta ciudad.
El personal recordó que hay médicos esperando la oportunidad de acercarse a Orizaba, pero se les niega ese derecho, pero sí trasladan a gente que no lo merece, aunado a que al no haber sanción, se expone a pacientes e incluso el mismo personal.