En el marco del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, la maestra Noemí Cabrera Mérida, coordinadora de la Licenciatura en Inclusión Educativa del Instituto Atenas, destacó que un apoyo y entorno adecuado permiten que aquellos que padecen trastornos del espectro autístico puedan disfrutar de las mismas oportunidades y participar.
“El autismo es una afección neurológica permanente que se manifiesta en la primera infancia, independientemente del género, la raza o la condición social y económica. El término espectro autístico se refiere a una serie de particularidades en la esfera de la interacción social y dificultades comunicativas comunes, modos de aprendizaje atípicos, especial interés por ciertos temas, predisposición a actividades rutinarias y particularidades en el procesamiento de la información sensorial”.
La maestra agregó que la Organización de las Naciones Unidas ha reconocido la diversidad a lo largo de su historia y promovido los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad, incluidos los niños con diferencias en el aprendizaje y discapacidad en el desarrollo.
Recordó que en el 2008 entró en vigor la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, lo que reafirmó el principio fundamental de los derechos humanos universales para todos.
A través de esta convención, dijo, se promueve, protege y asegura el goce pleno y en condiciones de igualdad de todos los derechos humanos y libertades fundamentales por todas las personas con discapacidad, además de promover el respeto de su dignidad inherente.
Con ello, destacó, se cuenta con una herramienta que permite fomentar una sociedad inclusiva que cuide a todos sus miembros.