Disminuye a menos de 50 por ciento el rezago en tribunales agrarios: magistrada

Con las acciones que se han tomado para abatir el rezago en todos los tribunales agrarios, a la fecha se ha disminuido a menos de 50 por ciento el atraso que había de asuntos anteriores al 2019, indicó María Eugenia Camacho Aranda, magistrada del Tribunal Unitario Agrario en el distrito 10.

“Nosotros estamos trabajando en un programa de abatimiento del rezago de todos los tribunales agrarios a nivel nacional, se está haciendo un gran avance, se han disminuido las cargas de trabajo de asuntos anteriores a 2019, que actualmente ya representan menos del 50 por ciento en todos los tribunales del país con el liderazgo de la magistrada Maribel Concepción Méndez de Lara, presidenta del Tribunal Superior Agrario”, indicó.

La magistrada explicó que el objetivo es abatir todo el rezago antes de que concluya el próximo año y así llegar al 30 aniversario de los tribunales agrarios.

Reconoció que durante la pandemia se suspendieron muchas actividades presenciales, pero ellos continuaron laborando a puerta cerrada y a distancia para no provocar un mayor atraso en los asuntos agrarios, aunque sí hubo afectación a las personas por el acceso a la justicia, como en todos lados.

Comentó que los conflictos que se dan sobre la tenencia de la tierra, que puede ser de naturaleza ejidal o comunal, y representa más del 52 por ciento del territorio nacional, es lo que lleva a las personas a recurrir a los tribunales agrarios.

Señaló que en los tribunales agrarios se cuenta con la Procuraduría Agraria y no se han detectado problemas de personas que soliciten dinero para presuntamente agilizar los trámites, además de que recordó que todos los procesos son gratuitos.

Sobre la reciente entrega de títulos de derecho agrario a mujeres de diez municipios de la zona centro, indicó que en los ejidos de Veracruz, como en todo el país, la participación de las mujeres es minoritaria, de menos del 30 por ciento, pero la intención es regularizar la tenencia de la tierra para ellas, que en muchas ocasiones son las que se quedan al cuidado y cultivo de las tierras porque los hombres migran.