Este fin de semana fueron despedidos Alán Domínguez Velázquez y Leopoldo Sánchez Calixto, obreros de la Refinería Lázaro Cárdenas del Río, víctimas mortales por la explosión en la planta Combinados Maya del sector cinco.
Alan y Leopoldo, fueron velados por separado en dos casas funerarias de Minatitlán, lugares a los que se dieron cita amigos, familiares y conocidos de los hoy occisos que, pasaron sus últimas horas de vida en el Hospital Regional de Petróleos Mexicanos (Pemex).
La tristeza y nostalgia fue el ambiente que se apreció en la última reunión de quienes fueron integrantes del taller de cambiadores de calor, los que al mediodía del jueves resultaron gravemente heridos cuando ejecutaban labores propias del oficio.
Tanto Alán como Leopoldo fueron declarados clínicamente muertos el sábado cuando recibían la asistencia hospitalaria junto a tres víctimas más, los que continúan luchando por sus vidas.
Cuatro de los cinco heridos acabaron con quemaduras de segundo y tercer grado en más del 80% del cuerpo, según las fuentes médicas.
El resto de los heridos prevalecen intubados, y a la espera de ser estabilizados para procederse al traslado a un centro especializado en la ciudad de México.
Finalmente, los empleados caídos en cumplimiento de su deber, fueron sepultados este fin de semana en cementerios de la ciudad.