En un paso significativo hacia la preservación ambiental, el presidente Andrés Manuel López Obrador decretó la conversión de tres playas del Totonacapan, en el norte de Veracruz, en áreas naturales protegidas.
Esta medida busca salvaguardar no solo el valor turístico de Cazones, Papantla y Tecolutla, sino también la rica biodiversidad que albergan.
La decisión gubernamental reforzó el compromiso con la preservación de la rica biodiversidad de estas playas veracruzanas, destacando la importancia de equilibrar el turismo con la conservación ambiental.
Con una extensión superior a las 81 hectáreas, estas playas son hogar de una diversa comunidad de 169 especies de aves nativas, representando el 24 por ciento de la avifauna veracruzana.
La región sirve como lugar de reproducción y ciclo biológico crítico para estas especies.
A pesar de ser destinos turísticos apreciados, estas zonas costeras enfrentan desafíos que amenazan la conservación de especies de tortugas marinas.
Cambios en el uso de suelo para fines agrícolas, ganaderos y construcción, junto con la presencia de fauna nociva y prácticas turísticas irresponsables, son factores críticos.
La CONANP, a través de la Semarnat, asumirá la responsabilidad de administrar, manejar, preservar y restaurar los ecosistemas de estas playas. Su labor incluirá supervisar que las actividades dentro del área protegida cumplan con la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
La medida ha sido recibida con entusiasmo por Leticia Villa, integrante del grupo ambientalista "Campamento Tortuguero del Totonacapan".
Este grupo ha denunciado repetidamente prácticas ilegales que amenazan la fauna marina en la región, como saqueo de nidos y pesca irresponsable.