Con aforo reducido, celebran Miércoles de Ceniza en Orizaba

De una manera atípica se llevó a cabo el Miércoles de Ceniza con una participación reducida de personas al 25 por ciento en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, afirmó el párroco Helkyn Enríquez Báez.

"Hace un año todavía lo pudimos celebrar más o menos del modo ordinario, pero ahora estamos ya en la continuidad de la pandemia que está cumpliendo un año en nuestro país y aunque es digamos atípico en el sentido de las medidas preventivas que se necesitan tomar de la modificación en la administración de la ceniza que ahora se ha puesto sin contacto sobre la cabeza y también de la limitación de la participación física a un cupo determinado para evitar las aglomeraciones de todas formas la gente se ha manifestado su interés en participar".

Recordó que la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús cuenta con una capacidad de 600 personas y solamente se está permitiendo el ingreso de 150 para cumplir con los protocolos de sana distancia y así evitar las aglomeraciones.

Resaltó que aparte de la presencia física en las celebraciones de acuerdo a lo estipulado y el cupo y que dentro de este habido una participación del cien por ciento, establecieron mecánicas tales como que la gente pudiera llevar a su casa las cenizas con el ritual específico de la imposición en casa lo que ha permitido una gran participación de más fieles.

Enríquez Báez acentuó que esta participación manifiesta la fe de las comunidades porque es uno de los días dónde llegan niños jóvenes adultos y adultos mayores y que refleja la religiosidad y el deseo de conversión que manifiesta este signo de la ceniza.

"Con la gracia de Dios queremos cambiar de vida y eso nos hace falta la conversión del país la renovación nacional se va a dar con el cambio de las personas por eso es que creemos que este tiempo es la oportunidad para el cambio de todo".

Esta actividad inició a partir de las 8 de la mañana y concluyó hasta las 9 de la noche, para poder considerar a las personas que trabajan y que también quisieran participar dentro de la última misa.

Cabe mencionar que a nivel diocesano cada parroquia realizó sus propias estrategias en la misma temática para poder lograr que las personas pudieran ver satisfecho este signo penitenciario.