Burocracia hace sufrir a estudiantes de primaria en Acayucan

Más de 200 alumnos de los turnos matutino y vespertino de la escuela primara “Capitán Hilario C Gutiérrez” tienen que recibir sus clases afuera de sus aulas debido a la falta de capacidad en el suministro de energía eléctrica, para la puesta en marcha de los servicios de climatización.

Y es que el plantel, desde hace aproximadamente quince días han tenido que enfrentar una variación de los niveles de electricidad porque fue cancelada una de las dos líneas de suministro con que contaban, esto como parte de la rehabilitación de los salones que se esta llevando a cabo con una millonaria inversión realizada por el gobierno federal, a través del programa La Escuela es Nuestra (LEEN). 

El programa pretende ofrecer un mejor suministro de energía eléctrica a las aulas mediante la actualización del cableado y el funcionamiento de un nuevo transformador de energía eléctrica. Aunque el aparato ya está colocado, no se ha podido poner en marcha por la falta de los permisos y validación de la Comisión federal de electricidad, a la empresa que fue contratada para el proyecto.

Junto a ese tramite burocrático de la CFE, está la falta de permisos por parte de la oficina de espacios educativos de la Secretaría de educación, para el cambio de voltaje, pues actualmente la escuela no paga el servicio de suministro, pero también requiere una aprobación especial  y evitar multas especiales.

La escuela fue beneficiada con el programa La escuela es nuestra, de la Secretaría del bienestar, recibiendo más de un millón de pesos, a través de un comité de padres de familia del turno matutino, pues es en esta donde más alumnos existen. En el turno vespertino son alrededor de 80 los estudiantes y el resto, en la mañana, pero a todos afecta la falta de un voltaje correcto como suministro para la escuela. 

Los padres se reunieron en la mañana de este jueves para buscar los mecanismos que destraben lo más rápido posible esos permisos, pues los más afectados son los menores de edad, que reciben sus clases bajo la sombra de árboles o en los lugares donde pueda aprovecharse la sombra.