Las bajas temperaturas registradas en los últimos días de enero han comenzado a generar preocupación entre los productores agrícolas de la región, particularmente para los cultivadores de limón persa, Eloy Marín Hernández, ingeniero agrónomo y productor de la localidad de La Primavera, advirtió sobre los estragos que el frío está causando en la floración de los árboles de limón, afectando directamente las cosechas futuras.
"Las temperaturas extremadamente bajas están quemando las flores de los árboles de limón", explicó Marín Hernández, "esto significa que, en los próximos meses, habrá una notable escasez de frutos en esta región y en otras zonas afectadas por el clima frío".
El ingeniero señaló que la problemática no es exclusiva de La Primavera, sino que también se extiende a áreas más altas de la sierra, donde las temperaturas suelen ser aún más extremas.
La falta de floración en los árboles de limón persa no solo impactará a los productores, sino que también se reflejará en el mercado, con un posible incremento en los precios del limón debido a la disminución de la oferta.
Marín Hernández subrayó que el frío de esta temporada es especialmente dañino porque coincide con un periodo crítico para la floración del limón, "si no hay floración adecuada, la producción se reduce drásticamente, lo que afecta a la economía de las familias que dependen de esta actividad", comentó.
Los productores de limón persa en La Primavera y comunidades vecinas han comenzado a evaluar estrategias para mitigar los daños, aunque las soluciones son limitadas frente a las inclemencias climáticas.
"Estamos en una situación complicada, sabemos que no podemos controlar el clima, pero necesitamos apoyo técnico y financiero para sobrellevar estas pérdidas", concluyó Marín Hernández, haciendo un llamado a las autoridades para brindar apoyo al sector agrícola en esta difícil temporada.
La incertidumbre persiste entre los productores, mientras el frío continúa amenazando una de las principales actividades económicas de la región.