Aunque el sector restaurantero es uno de los tantos golpeados por la pandemia, desde marzo del año pasado a la fecha, están aguantando los precios en las cartas y por ello, descartan que se pueda tener un aumento en breve, pues esto afectaría la economía de los comensales.
Al considerar que un aumento en estos momentos lejos de ayudar, los afectaría al ahuyentar a los consumidores Norma Mejía representante del gremio en la zona de la mata de Tampamachoco expuso que al menos durante el primer semestre del año, los costos de los platillos se mantendrá.
Si bien, reconoció que los ingresos no son los mismos, pues el costo por lo que ofrecen ya está muy por debajo de los gastos de operatividad de cada establecimiento, también manifestó que el mantener el precio les ayuda a qué sigan registrando ventas.
"Lamentablemente, todos los insumos que necesitamos para ofrecer la variedad de platillos en nuestros establecimientos han aumentado de precio, pero nosotros nos mantenemos con los mismos precios".
Durante las últimas semanas, con la reactivación económica y turística, el sector restaurantero ha registrado un aumento en ventas por arriba del 50 por ciento. No obstante, no es suficiente pues durante meses estuvo detenida la llegada de visitantes por el Coronavirus.
Al mismo tiempo, pidió a los comensales a apoyar al sector, con el objetivo que si se llegará a hacer un aumento, que podría ser pequeños dado a las circunstancias, no dejen de acudir a consumir ya que de esta manera el sector se irá recuperando paulatinamente.