Cada vez es más difícil dimensionar el nivel al que los Beatles fueron revolucionarios. La banda musical originaria de Liverpool, Inglaterra, es recordada como una de las más influyentes de todos los tiempos a nivel musical, pero lo cierto es que el alcance que tuvieron va mucho más allá.
Para los Beatles también comenzaron a ser importantes las portadas de sus álbumes, y aquel control en los detalles los hizo responsables en algunas de las imágenes más icónicas de la historia de la música.
Desde una foto distorsionada en Rubber Soul, un dibujo a mano mezclado con collage en Revolver, un colorido montaje en Sgt. Pepper y un recuadro totalmente blanco en su álbum homónimo, los Beatles no escatimaban en cuanto a hacer de sus álbumes auténticas obras de arte cuidando cada detalle.
Sin embargo, cualquier fanático del cuarteto no dudará que la portada más icónica entre todos sus álbumes, y posiblemente una de las imágenes más famosas de la historia, es la de sus cuatro integrantes cruzando un paso de cebra.
Se trata del álbum Abbey Road, nombrado por la calle donde se situaban los estudios de grabación EMI (que posteriormente serían renombrados “Estudios Abbey Road), que fue el centro de trabajo de los Beatles durante casi toda su carrera.
El álbum fue el penúltimo en ser lanzado, pero el último en ser grabado, por lo que representa el esfuerzo final del grupo por sacar su genialidad musical antes de su inminente separación. Inicialmente se barajaron muchas ideas para su título y portada, entre ellas una foto en el Monte Everest, pero al final se decidió mantener las cosas más simples y simplemente tomar la foto afuera del estudio.
La mañana del 8 de agosto de 1969, los Beatles contrataron a un policía para detener el tráfico, y ayudados por el fotógrafo Ian Macmillan, llevaron a cabo una rápida sesión de no más de 10 minutos en la que fueron fotografiados cruzando el paso peatonal un total de seis veces, en distintos sentidos.
La quinta foto fue la que resultó elegida para el producto final; era una imagen cercana a la perfección, pues fue la única foto en la que los cuatro Beatles caminaban en sincronía, mirando hacia el frente y las piernas en ‘V’.
Además, un detalle que fue del agrado de los Beatles, y sólo ellos sabían, es que en aquella foto cruzaban en el sentido que daba la espalda a los estudios, lo que interpretaron como una muestra de que se alejaban para entrar a un nuevo nivel en sus carreras.
Aunque el hecho de darles a los fanáticos más tiempo para analizar la portada fue uno de los detonantes de la famosa teoría conspirativa sobre la supuesta muerte de Paul McCartney.
El bajista aparece en la imagen cruzando la calle con los pies descalzos, y los conspiradores se dedicaron a buscar más detalles ocultos como la matrícula del Volkswagen, la vestimenta de los otros Beatles y un peatón que se aprecia al fondo observando al grupo, quien años más tarde fue identificado como un turista estadounidense.
A día de hoy, el paso peatonal de Abbey Road se ha convertido en una auténtica atracción turística para los fanáticos de los Beatles, quienes a diario lo cruzan para tener su propia foto imitando a su banda favorita; incluso, se ha instalado una cámara web en el lugar para registrar las múltiples recreaciones de la portada que se hacen a diario.
A 55 años de aquella sesión rápida de fotos, la portada de Abbey Road es uno de los muchos detalles que demuestran el nivel de la influencia de los Beatles, pues incluso el concepto más simple se ha convertido en uno de los mayores íconos de la cultura popular.