Desde Veracruz, Rubén Blades canta para familias de desaparecidos

En una noche cargada de emoción y solidaridad, el legendario cantante Rubén Blades dejó huella en el corazón de Veracruz. 

Durante su presentación estelar en el primer día del Salsafest 2024 en Boca del Río, el artista panameño dedicó su emblemática canción "Desapariciones" a las familias de personas ‘ausentes’ en México.

• La dedicatoria surgió a petición del colectivo veracruzano "Justicia y Dignidad", quienes días antes habían enviado un emotivo mensaje a Blades a través de un video en TikTok. 

"Las familias de personas desaparecidas del estado de Veracruz pedimos al cantante Rubén Blades dedique su canción 'Desapariciones' en el concierto que dará en el Salsa Fest 2024 en memoria de nuestros tesoros desaparecidos", expresaron.

UN CLAMOR QUE TRASPASA FRONTERAS

• Susana García Colorado, integrante del colectivo, hizo un llamado directo al artista: "Hola, señor Rubén Blades, disculpe, quisiera ver si usted nos puede interpretar la canción de 'Desapariciones' para todas esas familias que tenemos un ser desaparecido y también para mover el corazón a la gente y que sean más empáticos. Nosotros no pedimos vivir esto".

Blades, conocido por su compromiso social y su capacidad para dar voz a los más vulnerables, no dudó en atender el clamor de estas familias. 

• Antes de interpretar la icónica canción, dedicó un emotivo mensaje: "Una canción de nuestro primer álbum, se titula 'Buscando América', se la dedicamos con mucho afecto a todos los familiares de los desaparecidos en todas partes. No solamente en México, en todos los lugares que hay".

UNA CANCIÓN QUE TRASCIENDE FRONTERAS

"Desapariciones", una poderosa denuncia contra la violencia y la impunidad, cobró un nuevo significado en los labios de Blades. 

• Su letra resonó en el corazón de los asistentes, convirtiéndose en un himno que traspasó fronteras y unió a todas aquellas familias que han sufrido la desgarradora experiencia de la desaparición de un ser querido.

El concierto noche quedará grabado en la memoria colectiva de Veracruz como un acto de solidaridad y resistencia, un recordatorio de que la música tiene el poder de sanar heridas, denunciar injusticias y mantener viva la llama de la esperanza en los corazones de aquellos que más lo necesitan.