Desde temprana hora se informó que Consuelo Duval se habría sumado a la lista de víctimas de la estafa conocida como ‘la patrona’; sin embargo, con el paso del tiempo se han revelado nuevos indicios en torno a este hecho.
Fue una persona que trabaja en casa de la actriz y comediante quien habría sufrido las consecuencias del supuesto engaño, pues terminó entregando alrededor de medio millón de pesos a los delincuentes.
Según revelaron medios nacionales, los hechos ocurrieron la tarde del martes en una zona habitacional en la alcaldía Cuajimalpa, donde Duval tiene su domicilio.
La empleada doméstica narró que recibió una llamada telefónica, asegurando que la voz que se escuchaba al otro lado de la línea era la de Consuelo Duval, quien supuestamente había tenido un problema en el aeropuerto y requería de una gran suma de dinero para salir de dicha situación.
La empleada narró que accedió inmediatamente a esta petición al escuchar la voz de la artista, supuestamente generada con inteligencia artificial; acto seguido, dos unidades contratadas en la plataforma Uber llegaron al domicilio, a quienes entregó además del dinero joyas y otros artículos de valor.
La mujer permanece bajo custodia de las autoridades mientras se realizan las investigaciones. Sin embargo, las cosas dieron un giro conforme pasaban las horas.
En sus redes sociales, Consuelo Duval confirmó que había sido víctima de la delincuencia; sin embargo, descartó que esto haya sido debido a la famosa estafa de ‘la patrona’, dando un poco más de luz sobre los hechos.
La comediante rechazó que una de sus empleadas haya sido víctima de la estafa ‘la patrona’ y señaló que se debió al ‘abuso de confianza’ de esta persona, y su complicidad con otras más el robo a su domicilio.
Además, señaló que sus perros, a los cuales cuidaba esta persona, permanecieron encerrados mientras todo ocurrió, por lo cual debía llevarlos al veterinario para ver que no hubieran sufrido daños.
Consuelo Duval confirmó que ya presentó una denuncia, por lo que no puede dar mayores declaraciones y dejó todo en manos de la justicia, esperando se aclaren los hechos.