La venta de autos usados en México es una opción atractiva para quienes buscan adquirir un vehículo a un precio accesible y también para aquellos que buscan liquidez al vender su unidad.
Sin embargo, este mercado, que ha crecido gracias al auge de las plataformas digitales y redes sociales, presenta ciertos riesgos, especialmente cuando las transacciones ocurren en el ámbito informal.
Con la creciente demanda de autos seminuevos, plataformas especializadas, concesionarias y redes sociales como Facebook se han vuelto herramientas clave para los compradores y vendedores.
A pesar de la variedad de opciones, muchas transacciones aún se realizan de manera informal, lo que aumenta la posibilidad de fraudes, problemas de documentación y registros vehiculares irregulares.
Por ello, es crucial que tanto el comprador como el vendedor tomen medidas para protegerse y garantizar la legalidad del proceso.
El primer paso para los vendedores es asegurarse de que el vehículo no tenga adeudos, como multas o verificaciones pendientes.
En plataformas como Kavak, las deudas se descuentan del precio final, mientras que en ventas entre particulares, el comprador puede volverse responsable de la regularización del automóvil.
Tanto para vendedores como para compradores, es vital tener la documentación en regla antes de proceder con la venta.
El vendedor debe tener la factura original del vehículo, pagos de tenencia, identificación oficial y un comprobante de domicilio.
La falta de una factura original puede ser una señal de posible fraude.
El contrato de compra/venta es esencial para oficializar la transacción y será necesario para realizar el trámite de cambio de propietario, que debe ser gestionado por el comprador.
En la Ciudad de México, este trámite tiene un costo de 398 pesos y se realiza ante la Secretaría de Movilidad (Semovi).
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Los fraudes en la compra de autos usados son más comunes de lo que se piensa. Se estima que hasta un tercio de las transacciones presentan algún tipo de irregularidad. Para evitar caer en una estafa, es recomendable acudir a las fiscalías, que ofrecen programas gratuitos para cotejar la validez de los documentos del vehículo.
Además, se sugiere que los pagos se realicen únicamente a través de instituciones bancarias y evitar el uso de efectivo.
También realizar las transacciones de lunes a jueves, ya que los pagos realizados un viernes pueden quedar en tránsito durante el fin de semana, lo que aumenta el riesgo de que no lleguen a su destino.