La apreciación del peso mexicano en 2023 no tiene precedentes, al menos desde que el régimen del tipo de cambio pasó a ser de libre flotación en 1994.
En lo que va del año, la moneda nacional acumula una apreciación de 13.94 % frente al dólar, luego de que el miércoles el tipo de cambio cerró en 17.1227 unidades por divisa estadounidense.
Se trata del mejor nivel del peso mexicano desde el 18 de diciembre de 2015, de acuerdo con datos de Banco de México (Banxico).
De esta manera, el peso perfila su mayor ganancia anual bajo el régimen de libre flotación, que se implementó en medio de la devaluación de la moneda a mediados de los años 90, un episodio conocido como el ‘error de diciembre’.
Con este régimen, el mejor año para la moneda hasta la fecha había sido el 2012, el último de la presidencia de Felipe Calderón, cuando tuvo una apreciación de 8.56 % entre enero y diciembre.
El único aspecto negativo en esta tendencia es que, con la apreciación de la moneda mexicana, se afecta a las exportaciones donde los acuerdos de pago son en dólares, disminuyendo las ganancias para los exportadores mexicanos
En este escenario, los exportadores y los receptores de remesas son los más perjudicados, al no poder contrastar los efectos de esta apreciación a la misma velocidad
Se estima que los niveles actuales del peso pueden ocasionar la desaceleración del consumo, ya que los productos mexicanos se encarecen en los mercados internacionales, lo que resulta en la pérdida de competitividad.
Ante esto, el Gobierno federal ha apostado a traer más capitales extranjeros, que permitan dar fortaleza a sus divisas sin que ello implique nuevamente la caída del peso, sino al contrario, fortalecer la economía.
Esto traería como consecuencia que el poder adquisitivo de las familias mejore, fluya más capital y los exportadores compensen con el consumo interno la disminución del precio del dólar.