Bien dicen que cada pueblo tiene el gobierno que merece, y en el puerto de Veracruz volvieron a darle otra oportunidad al grupo del PAN de la familia Yunes Márquez, que de última hora tuvo que postular a Patricia Lobeira, luego de que los tribunales electorales anularon la candidatura de su esposo Miguel Ángel Yunes Jr.
Por eso nadie debió sorprenderse de que la señora Lobeira ratificara en algunos relevantes cargos a excolaboradores de su cuñado Fernando Yunes Márquez, entre ellos a Jorge Miguel Rodríguez Ramírez, quien repetirá como comandante de la Policía Municipal no obstante que de enero a noviembre de 2021, según el Informe de Incidencia Delictiva del Fuero Común, de la Secretaría de Gobernación, Veracruz fue la primera ciudad en el estado y la cuarta del país con más robos violentos a negocios, al sumar mil 345 denuncias por este delito.
Rodríguez Ramírez, como se recordará, estuvo desempeñándose durante más de un año como “encargado” de la Policía porteña, hasta que en febrero pasado el Centro de Control de Confianza de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) lo certificó y tomó protesta formal como comandante de la policía porteña.
Sorprendió que hasta entonces este jefe policiaco hubiera aprobado el examen de confianza, pues acababa de desempeñarse en la administración del exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares como director Jurídico de la SSP. En dicho puesto fue acusado de abuso de poder en perjuicio de la entonces diputada local expanista Cynthia Lobato y su esposo Francisco Hernández Toriz.
A finales de julio de 2018, Lobato Calderón organizó una conferencia de prensa para desactivar un presunto operativo mediante el cual, según acusó, Rodríguez Ramírez y otros funcionarios yunistas coludidos con camaradas del PAN pretendían “sembrarle” fosas clandestinas en un cementerio xalapeño de su propiedad.
Lobato denunció además que Francisco Aguilar Rizo, a la sazón Jefe del Departamento de Vigilancia Sanitaria de la Secretaría de Salud, se habría coludido con Jorge Miguel, ya que horas después de su renuncia a la bancada blanquiazul montaron un operativo para clausurar un bar de familiares de su esposo. La legisladora mostró videos en los que se observaba la forma burda en que policías de la SSP “sembraban” droga en el interior del establecimiento.
Aguilar Rizo, tío del exdiputado local Sergio Hernández, encabezó la brigada del operativo de la SSA en el bar “Hunter” y una de sus subordinadas, Rosa Aurora Azamar Arizmendi, entonces directora de Protección Contra Riesgos Sanitarios, se encargó de firmar las actas de suspensión del lugar el 20 de julio de 2018.
Un año antes, en julio de 2017, de forma artera dos delincuentes hirieron de bala a un empleado del mismo bar propiedad de los familiares del esposo de Lobato, lo que sirvió de pretexto para que Jorge Miguel llegara con un grupo de policías que igualmente pretendieron “sembrar” municiones y un arma en el interior del local. Todo quedó videograbado, sin embargo, la Fiscalía jamás procedió contra los agresores ni llamó a declarar a Rodríguez Ramírez por su malogrado operativo.
¿Con estos lastres que le impusieron, Lobeira sería una atractiva precandidata de oposición a la gubernatura de 2024? Francamente se duda.