Los cubrebocas y trastes de unicel son la basura más generada durante la Pandemia, siendo hasta tres toneladas las recolectadas por EcoKaans en la fase de confinamiento.
Ante esto, Tania Maldonado Antonio, representante legal de esta asociación civil, pidió a la ciudadanía hacer un uso correcto del cubrebocas y evitar tirarlos en la vía pública, especialmente en la playa y alcantarillas.
“Hay que guardarlos en la bolsa del pantalón, en nuestra bolsa, mochila o carro para que no terminen en la calle, o en las playas, en este caso; o de manera trágica en el estómago de algunas especies, es lo que buscamos ahorita (evitar que tiren cubrebocas)… incrementó, pero no sólo fueron de cubrebocas, sino el uso del unicel por toda la comida que se pedía en domicilio”, explicó Maldonado Antonio.
Aunque los servicios a domicilio ya existen, fue durante los primeros meses de pandemia cuando éstos se incrementaron debido al confinamiento de la ciudadanía, por lo que la compra de comida a través de envíos se volvió más frecuente.
“Hablo de tres toneladas diarias de unicel que incrementó muchísimo en volumen… sí redujo, porque ya muchos regresamos a nuestras actividades normales, a nuestros trabajos, eso fue como el pico donde estuvimos encerrados, que fueron como tres o cuatro meses… hay que hacer conciencia del manejo correcto de los residuos, del cubrebocas su ya no me sirve lo corto para que nadie lo pueda volver a utilizar y lo deposito en un lugar seguro”, mencionó la representante legal de EcoKaans.
En caso de que el cubrebocas se caiga es necesario recogerlo y depositarlo en el bote de basura, pues es común verlos tirados en las calles, ya sean desechables o de tela.
“En el malecón, bueno, es una cosa exagerada y más cuando llueve, no sé si han dado cuenta que en las alcantarillas quedan muchísimos cubrebocas de todos los colores…cubreboca de tela o cubreboca desechable hay que ser responsables de levantarlos y depositarlos en un lugar seguro”, puntualizó Tania Maldonado.