El elegido o la elegida, que con el paso del tiempo y del vínculo te haga sentir algo parecido a ese sentimiento de cuando eras niño. Tu media naranja tendría que ser compatible contigo en varios ámbitos, significa una persona con la cual te sientas verdaderamente dichosa o dichoso a su lado. En donde aprendes, creces y eres libre. La pareja ideal es aquella en donde lo emocional y espiritual es un balance en ti ¿Quieres encontrar a tu media naranja? No busques afuera, sino dentro de ti, comienza un crecimiento interno a través del Mildfulness…y en breve esa otra historia tocará tu puerta.
Céntrate en tu actitud, en el aquí y ahora. No supongas ni hagas conjeturas, solo enfócate en la forma y medida en que ves el tema de pareja. Tu actitud tiene que ser como un termóstato del lugar donde estás, si vibras en armonía, los demás comenzarán a acercarse como las plantas a la luz.
Dialoga con tu Yo interno. Pregúntale qué quiere dentro de un vínculo de amor. Nunca hallarás esa media naranja si primero no sabes qué y cómo lo quieres. Es aquí donde echas andar la madurez y la seguridad interna. Capaz de ofrecer lo que tú deseas en las esferas de tu vida.
Ten clara tus prioridades. Con ello podrás colocar filtros ante lo que venga, incluso “naranjas podridas” para que no repitas patrones.
Que tu alma gemela te encuentre. En lugar de andar con tu mapa por la vida, permite que el amor te localice en alguna esquina, sin proponértelo ni hacer planes. Disfruta tu vida, sé feliz, empático, amable e íntegro contigo mismo (a). Solo quien ve el camino con luz propia, sabe lo que merece, y en corto plazo esa alma gemela dará con tu dirección.