Xalapa | 2024-11-12
México enfrenta una creciente crisis de agua, afectando a 30 de sus 32 estados, y Xalapa no es la excepción. Entre abril y octubre de 2023, la falta de agua fue particularmente severa en las zonas periféricas de la ciudad, generando protestas y obligando a los habitantes a buscar alternativas como la compra de agua y su reciclaje.
A futuro, se proyecta que entre el 40% y el 80% de la población sufrirá estrés hídrico para 2050, según datos del Instituto de Recursos Mundiales. Esta situación crítica, ignorada durante más de cinco décadas, ha resultado en una disminución del 70% de agua per cápita a nivel nacional, según estudios de la UNAM.
La crisis de agua en Xalapa tiene múltiples causas, entre ellas, la pérdida de ecosistemas y el cambio climático. El abastecimiento de la ciudad depende en gran medida de las cuencas del río Huitzilapan, el río Pixquiac y de siete manantiales. Sin embargo, el volumen de agua en estas fuentes ha disminuido considerablemente desde 2018, de acuerdo con la Comisión Municipal de Agua Potable y Saneamiento (CMAS) de Xalapa.
Además, esta escasez se atribuye a la pérdida del bosque mesófilo de montaña, un ecosistema que desempeña un papel crucial en el ciclo del agua. Desde 1992, extensas áreas de bosque han sido taladas para dar paso a proyectos de urbanización, comprometiendo la capacidad de la región para retener agua. Esta situación, combinada con la sobrepoblación y la contaminación de las masas de agua, ha provocado una creciente crisis hídrica, afectando tanto a las comunidades locales como al medio ambiente.
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Ante esta situación, la CMAS ha diseñado un plan para mitigar la escasez de agua en Xalapa en el año 2025. El plan contempla la adquisición de pipas de agua y la exploración de nuevas fuentes de abastecimiento. La Comisión ha reconocido la urgencia de asegurar recursos hídricos adicionales para enfrentar el próximo periodo de estiaje, y se está trabajando en estrategias para complementar las fuentes de agua actuales.
En colaboración con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), CMAS ha iniciado la evaluación de un pozo en la zona de El Castillo, donde recientemente se encontró agua subterránea a más de 250 metros de profundidad. Las pruebas de calidad determinarán si esta agua es apta para el consumo humano. Si Conagua da el visto bueno, se procederá a construir la infraestructura necesaria para extraer y distribuir esta agua a las colonias afectadas de Xalapa. Se contempla la instalación de equipos de bombeo y un sistema de tuberías que permitan su adecuada distribución.
La situación de Xalapa en materia de agua representa un reto que refleja la vulnerabilidad de muchas regiones en México. La implementación del plan hídrico de CMAS es un paso hacia una mejor gestión de los recursos, pero queda mucho por hacer en términos de conservación de ecosistemas y mejora de la infraestructura. La crisis hídrica demanda no solo soluciones técnicas, sino también un enfoque integral que considere la equidad en el acceso al agua, el control sobre la explotación industrial y el compromiso con la sostenibilidad ambiental.